Suelo Pélvico
El suelo pélvico es un conjunto de músculos, fascias, ligamentos y estructuras óseas que forman el suelo de la cavidad abdominal y dan sostén a los órganos pélvicos, tanto masculinos como femeninos.
Existen muchos factores de riesgo para lesionarlo, como pueden ser la edad, el sobrepeso, la postura, el embarazo y parto, los deportes de impacto o incluso los malos hábitos… es importante cuidarlo y ser consciente de él como parte de nuestro cuerpo, ya que es fundamental para el correcto funcionamiento de nuestro sistema genitourinario y digestivo. Además, su disfunción no solo provoca problemas pélvicos, sino que, al formar parte de la cavidad abdominal y el core es fundamental para la postura y la estática corporal.
¿Cómo puede ayudarme un fisioterapeuta a cuidar mi suelo pélvico?
Dentro de la fisioterapia existen diversas técnicas manuales, instrumentales, de entrenamiento muscular, reeducación postural y manejo del dolor que han demostrado ser muy beneficiosas para abordar las disfunciones del suelo pélvico y prevenir su aparición. Tu fisioterapeuta identificará aquellos hábitos y factores que pueden suponer un riesgo potencial para tu suelo pélvico y te proporcionará herramientas para cambiarlos.
¿En qué consiste la valoración de suelo pélvico?
El fisioterapeuta recopilará toda la información necesaria para conocer tu estado de salud, antecedentes personales y familiares, tus síntomas y objetivos. A continuación se realizará la exploración física, valorando tu postura, columna lumbar, diafragma y faja abdominal. Después se valorará la musculatura de tu suelo pélvico y la posición de tus vísceras pélvicas, para ello se debe realizar una exploración intracavitaria a través de la vagina o el ano. Esta exploración no es dolorosa y no dura más de 15 minutos. Por último tu fisioterapeuta te explicará tu situación, te propondrá un tratamiento y unos objetivos terapéuticos y por supuesto responderá a cualquier duda que puedas tener.
¿Cuándo es conveniente que acuda a valorar el estado de mi suelo pélvico?
Ante cualquier alteración de la normalidad de su funcionamiento, pre o postoperatorio a una cirugía abdomino-pélvica, embarazo y parto, práctica de deportes de impacto, presencia de dolor pélvico o simplemente si quieres conocer y mejorar el estado de tu suelo pélvico está indicado su tratamiento y valoración. En caso de no poder abordar tu problema, tu fisioterapeuta especializado te derivará a otro profesional sanitario.
A continuación, te dejamos algunos de los síntomas más comunes que estarían indicados para recibir un tratamiento de fisioterapia:
- Dolor pélvico, dolor menstrual, dolor durante las relaciones sexuales, dolor anal.
- Estreñimiento.
- Incontinencia urinaria, urgencia urinaria.
- Incontinencia fecal y anal.
- Preparación al parto y recuperación postparto.
- Cicatrices abdominales, cesáreas, desgarros, episiotomías, fisuras anales.
- Prolapsos.
- Diástasis y debilidad abdominal.
- Prostatectomía y prostatitis
Cuanto antes comiences tu tratamiento, mejores serán los resultados, ¡consulta a tu fisioterapeuta especializado!
